Buscando apoyos 177 BASES DE CONTENEDORES están ya muy solicitados por otras ramas industriales. Los expertos reconocen la necesidad de contar con el apoyo de los gobiernos autonómicos, aunque todos lamentan el desconocimiento de la Administración, algo en lo que coinciden todos los expertos entrevistados. José Ávila, CEO de Intercontainer, denuncia una nula implicación, algo que asevera Juan José Pérez, director de Progeco Bilbao. Viliam Koudelka, director de Progeco Barcelona; Tomás Pallisé, de Martainer; y Jaume Viladerbó, director general de Depot Zona Franca hablan de “espacio para la mejora” en este sentido y reiteran ese desconocimiento de las administraciones. Pascual García, director general de Docks, se muestra muy crítico con el papel que juega la Administración: “Ni los trámites son ágiles ni la Administración está concienciada para conceder permisos en ubicaciones viables en sus municipios”. Rafael Yago, gerente de Tymsa, aboga por pensar de manera más panorámica, porque los depots forman parte de la cadena logística global. En ese sentido, “la acción de las administraciones es decisiva en toda la cadena porque el depósito es uno de los eslabones más débiles”. CAMBIO TARIFARIO Para los depots, otro de los problemas ligados a esa falta de espacios son sus ajustados márgenes, que en ocasiones impiden a las bases acometer procesos de ampliación. Los expertos consultados lamentan que, incluso en el hipotético caso en que los trámites para habilitar nuevas áreas fueran ágiles y que la Administración fuera consciente del papel de esa plataforma en el buen desarrollo de la cadena logística, los recursos financieros para ponerlos en marcha serían muy escasos, casi inexistentes. Por ello, ya hace tiempo que sobre la mesa está la posibilidad de cambiar el modelo de tarificación actual por otra más flexible en función de los tráficos que cada naviera aporta. Alfredo Soler, CEO de TransBase Soler, explica que puede ser que haya llegado el momento de afrontar este debate: “Si llegado un pico una naviera se ve obligada a desviar barcos a otros puertos por falta de capacidad, supone unos grandes sobrecostes económicos y comerciales, una situación que no interesa a nadie. Por tanto, de algún modo debemos llegar a un punto en el que las bases aumentamos nuestros espacios pero que tengamos garantía de poder rentabilizarlos”. Para ello, “una fórmula podría ser la de fijar tarifas flexibles según volúmenes, de modo que cuando menos se use la instalación, mayor sea la tarifa para compartir de algún modo esa sobreinversión que se hace para dar respuesta a necesidades puntuales de las navieras”. Pascual García, director general de Docks, reconoce que “actualmente la tarifas de los depots son bajas, con dificultades para actualizarlas y se requieren de inversiones altas para tener más superficie disponible”. Así, asegura que “una tarificación combinada de una parte fija y otra flexible podría ayudar”, aunque matiza que “nosotros pensamos que el camino sería llegar a acuerdos de verdaderos partners con los clientes pues ello ayudaría a crecer juntos minimizando los riesgos”. Con todo, la opción de un cambio en el sistema de tarificación actual no es contemplada por la gran mayoría de las fuentes consultadas. La necesidad de parcelas grandes a precios bajos, la generación de un gran volumen de transporte pesado y el hecho de requerir buenas conexiones terrestres y una cercanía a los puertos reduce las opciones para habilitar nuevas zonas en las que instalar nuevos depósitos de contenedores La acción de las administraciones es decisiva en toda la cadena porque el depósito es uno de los eslabones más débiles Rafael Yago Gerente de Tymsa
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